Somos una iglesia
1. Cristiana
2. Evangélica
3. Apostólica
4. Reformada
5. Misionera
Estamos llamados a:
“Proclamar el evangelio para la salvación de los pecadores, el amparo, la educación, y la confraternidad espiritual de las personas”
“Adorar a Dios y congregarnos alrededor de su Palabra. Su lectura, audición, predicación y confesión son centrales en la adoración Cristiana”
“Servir a Dios, según lo enseña la Biblia, Palabra de Dios; única regla de fe para el creyente y única forma como Él nos enseña, habla y dirige” (1 Tes. 2:13)
Nuestra Iglesia cree en:
1. Un único Dios Tri-uno (Mt. 28:19-20)
2. La soberanía de Dios (Rm. 9:20, 21)
3. La humanidad y divinidad de Cristo
4. La elección (Ef. 1:3-5; Jn. 15:16)
5. La salvación solo por Gracia (Ef. 2:8-9)
6. El pacto eterno de Dios (Jer. 32:40)
7. La salvación solo por Fe (Rm. 4:16; 11:6)
8. La seguridad de salvación (Jn. 10:27-29)
9. La iglesia universal (Jn. 3:16; Rm. 12:4-5)
10. La iglesia verdadera (Ef. 4; 1 Cor. 12)
11. La autoridad de la Biblia (2 Tm. 3:15-17)
12. La Biblia, la Palabra de Dios (Jn. 5:39)
13. El sacerdocio de todo creyente (Hb. 4)
14. El bautismo cristiano (Col. 2:11-12)
15. La cena del Señor (1 Cor. 5:7; Hb. 10:12)
16. La mayordomía (Lv. 27:30-32; 1 Cor. 16:2)
Horarios de reunión
Domingos 9:00 AM Escuela Dominical
Domingos 10:00 AM Adoración y estudio bíblico
Miércoles 7:00 PM Oración y enseñanza
Viernes 7:00 PM Reuniones evangelísticas
“Escudriñad las Escrituras porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna, y ellas son las que dan testimonio de mí” (Jn. 5:39)
1. Cristiana
2. Evangélica
3. Apostólica
4. Reformada
5. Misionera
Estamos llamados a:
“Proclamar el evangelio para la salvación de los pecadores, el amparo, la educación, y la confraternidad espiritual de las personas”
“Adorar a Dios y congregarnos alrededor de su Palabra. Su lectura, audición, predicación y confesión son centrales en la adoración Cristiana”
“Servir a Dios, según lo enseña la Biblia, Palabra de Dios; única regla de fe para el creyente y única forma como Él nos enseña, habla y dirige” (1 Tes. 2:13)
Nuestra Iglesia cree en:
1. Un único Dios Tri-uno (Mt. 28:19-20)
2. La soberanía de Dios (Rm. 9:20, 21)
3. La humanidad y divinidad de Cristo
4. La elección (Ef. 1:3-5; Jn. 15:16)
5. La salvación solo por Gracia (Ef. 2:8-9)
6. El pacto eterno de Dios (Jer. 32:40)
7. La salvación solo por Fe (Rm. 4:16; 11:6)
8. La seguridad de salvación (Jn. 10:27-29)
9. La iglesia universal (Jn. 3:16; Rm. 12:4-5)
10. La iglesia verdadera (Ef. 4; 1 Cor. 12)
11. La autoridad de la Biblia (2 Tm. 3:15-17)
12. La Biblia, la Palabra de Dios (Jn. 5:39)
13. El sacerdocio de todo creyente (Hb. 4)
14. El bautismo cristiano (Col. 2:11-12)
15. La cena del Señor (1 Cor. 5:7; Hb. 10:12)
16. La mayordomía (Lv. 27:30-32; 1 Cor. 16:2)
Horarios de reunión
Domingos 9:00 AM Escuela Dominical
Domingos 10:00 AM Adoración y estudio bíblico
Miércoles 7:00 PM Oración y enseñanza
Viernes 7:00 PM Reuniones evangelísticas
“Escudriñad las Escrituras porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna, y ellas son las que dan testimonio de mí” (Jn. 5:39)
¡Es nuestro deseo contar con su asistencia y participación en la iglesia!
Visítenos o comuníquese con nosotros
BIENVENIDOS
“Nadie muestra más amor que quien da la vida por sus amigos” (Jn. 15:13)
“Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí;
y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí” (Gál. 2:20)
"Dios amó tanto a la gente de este mundo, que me entregó a mí, que soy su único Hijo, para que todo el que crea en mí no muera, sino que tenga vida eterna" (Jn. 3:16)
La Iglesia Presbiteriana Betania de la Reforma con sede en Bogotá en el barrio Usaquén es una iglesia dedicada a la sana enseñanza y aplicación de todas las verdades contenidas en la Biblia, que es la Palabra de Dios. Nuestro propósito primario es facilitar la comprensión del mensaje de amor y vida contenido en ella, aclarar las dudas más comunes e instruir para el enriquecimiento de la vida en Cristo.
Nuestro deseo es que a través de nuestra iglesia pueda usted conocer de Cristo y descubrir verdades transformadoras para su vida. Estamos muy agradecidos con Dios porque Él ha permitido que le conozcamos cada vez más y estemos mejor capacitados para enseñar.
Nuestra intención es preparar y poner a su disposición una diversa y amplia gama de materiales que puedan auxiliarle en su estudio de la Biblia, para que todos los creyentes podamos “...estar siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros” (1 Pd. 3:15). Esperamos que el material aquí contenido sea útil para el crecimiento, desarrollo y fortalecimiento de su fe en Jesucristo y por sobre todo para la gloria de Dios.
QUIENES SOMOS
“Conociendo su voluntad… por la eficacia de su Palabra
Compartiendo su mensaje… por la gracia del evangelio
Creciendo en el carácter… por el poder de Cristo
Capacitando a los santos… para la obra del ministerio
Caminando en integridad… para la gloria de Dios”
La Iglesia Presbiteriana Betania de la Reforma con sede en Bogotá en el barrio Usaquén existe para conocer, compartir y crecer en el conocimiento sano de las verdades bíblicas, tal y como han sido dejadas en las Sagradas Escrituras. De tal manera, que vivamos responsablemente para Jesús y demos gloria a nuestro gran Dios en y por todas las cosas.
“Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo y miembros cada uno en particular” (1 Cor. 12:27). La iglesia como un organismo vivo crece adecuadamente por la gracia de Dios que ha depositado responsabilidad en cada uno de sus miembros, para que cumplan su rol como creyentes y miembros del cuerpo de Cristo.
Como iglesia, estamos totalmente comprometidos con la gloria de Dios, la centralidad de Cristo y de la Escritura. Somos una iglesia cristiana confesional, que promueve los valores del Reino y se funda en el amor que hemos recibido por la gracia del sacrificio de Cristo y en la vida que tenemos y disfrutamos por la fe del evangelio
A continuación presentamos un resumen de los fundamentos doctrinales a los que nos adherimos. No es una declaración de fe detallada, pero sí destaca los puntos principales en los que creemos.
Respecto a la Biblia:
Creemos que la Biblia, en su totalidad, es la Palabra inspirada de Dios. Esta inspiración se extiende igual y completamente a todas las partes de la Escritura como aparece en los manuscritos originales; toda la Biblia en los originales es por tanto sin error. Creemos que todas las Escrituras se centran alrededor del Señor Jesucristo en Su persona y obra, en Su primera y segunda venida y como consecuencia ninguna porción, aun del Antiguo Testamento, se lee y entiende correctamente sólo hasta que conduce a Él. Creemos también que toda Escritura fue designada para nuestra instrucción práctica al ser guía infalible de fe y conducta y ser perfectamente confiable en todas sus partes, tal y como fue dada por Dios. Es la última autoridad inequívoca y todo su contenido es verdad
(2 Tm. 3:16; 2 Pd. 1:21; Lc. 24:27, 44; Jn. 5:39; Rm. 15:4; 1 Cor. 10:11; 2 Tm. 3:16).
Respecto al Dios Trino:
Creemos en el único Dios verdadero y viviente, Creador, Redentor, Sustentador y Gobernador de todas las cosas. Él es infinito, eterno, perfecto e inmutable. Él existe eternamente y se ha revelado en tres Personas: el Padre, su Hijo Jesucristo y el Espíritu Santo, quienes son de la misma sustancia e iguales en poder y gloria.
Dios Padre:
Dios como Padre, reina sobre todo su universo con cuidado providencial. El es todopoderoso, misericordioso, justo, sabio. El es paternal en gracia común para con los hombres, pero es Padre amoroso y tierno para aquellos que han sido adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo (Gén. 1:1; 1 Cró. 29:10; Jer. 10:10; Mt. 6:9; Hc. 1:7; Rm. 8:14-15; 1 Cor. 8:6; 15:24; Ef. 4:6).
Dios Hijo:
Creemos que el Señor Jesucristo, el Hijo eterno de Dios, se hizo hombre sin dejar de ser Dios, habiendo sido concebido por el Espíritu Santo, a fin de revelar a Dios y redimir al hombre pecador. Es Dios encarnado, unigénito Hijo de Dios, totalmente Dios y totalmente hombre por sus dos naturalezas. Nació de la virgen María, vivió sin pecado, enseñó la Verdad, murió en la cruz para redimir a su pueblo, resucitó corporalmente, ascendió a la diestra del Padre, de donde regresará en poder y gran gloria a juzgar a los vivos y a los muertos (Lc. 1:34-35; Jn. 1:1, 2, 14, 18; Rm. 3:24-26; 8:3).
Dios Espíritu Santo:
Respecto al Dios Trino:
Creemos en el único Dios verdadero y viviente, Creador, Redentor, Sustentador y Gobernador de todas las cosas. Él es infinito, eterno, perfecto e inmutable. Él existe eternamente y se ha revelado en tres Personas: el Padre, su Hijo Jesucristo y el Espíritu Santo, quienes son de la misma sustancia e iguales en poder y gloria.
Dios Padre:
Dios como Padre, reina sobre todo su universo con cuidado providencial. El es todopoderoso, misericordioso, justo, sabio. El es paternal en gracia común para con los hombres, pero es Padre amoroso y tierno para aquellos que han sido adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo (Gén. 1:1; 1 Cró. 29:10; Jer. 10:10; Mt. 6:9; Hc. 1:7; Rm. 8:14-15; 1 Cor. 8:6; 15:24; Ef. 4:6).
Dios Hijo:
Creemos que el Señor Jesucristo, el Hijo eterno de Dios, se hizo hombre sin dejar de ser Dios, habiendo sido concebido por el Espíritu Santo, a fin de revelar a Dios y redimir al hombre pecador. Es Dios encarnado, unigénito Hijo de Dios, totalmente Dios y totalmente hombre por sus dos naturalezas. Nació de la virgen María, vivió sin pecado, enseñó la Verdad, murió en la cruz para redimir a su pueblo, resucitó corporalmente, ascendió a la diestra del Padre, de donde regresará en poder y gran gloria a juzgar a los vivos y a los muertos (Lc. 1:34-35; Jn. 1:1, 2, 14, 18; Rm. 3:24-26; 8:3).
Dios Espíritu Santo:
Creemos que el Espíritu Santo, como persona de la trinidad está presente en la tierra desde la creación. Al ascender Jesucristo al cielo, fue enviado para habitar, guiar, enseñar y fortalecer a todos aquellos que creemos en el Señor Jesucristo como nuestro Dios, Salvador y Señor. Creemos que Él convence al mundo de pecado, de justicia y de juicio. Él incorpora a todos los creyentes en la única verdadera Iglesia, la cual es el Cuerpo de Cristo; mora en ellos permanentemente, los sella para el día final de la redención, les confiere dones espirituales y produce frutos de rectitud y santidad por la Palabra de Dios (Jn. 3:3-8; 14:16-17; 16:7-11; 1 Cor. 12:7-11, 13; Ef. 4:30; 5:18).
Respecto a la condición humana:
Respecto a la condición humana:
Creemos que el ser humano fue creado directamente por Dios a su imagen y semejanza, pero por desobediencia Adán, el primer hombre, cayó en pecado y desde entonces toda la humanidad tiene una naturaleza pecaminosa que le incita a hacer de continuo solamente el mal. El ser humano está condenado, separado, enemistado y totalmente muerto en delitos y pecados y no podrá por ningún medio, cambiar esta condición, aparte de la revelación de Dios en Cristo. A menos que el hombre nazca de nuevo por el Espíritu Santo, no puede ver el reino de Dios (Gén. 1:1; 26-27; Jn. 1:3; 3:3; Col. 1:16-17; Rm. 3:10, 23).
Respecto a la redención:
Respecto a la redención:
Creemos que el Señor Jesucristo derramó Su sangre al morir en la cruz por nuestros pecados, reconciliándonos con el Padre a través de su sacrificio eficaz. Por medio de la fe en la obra redentora de Jesucristo, somos traídos al arrepentimiento, librados de la condenación eterna y del poder del pecado. Creemos que la salvación es un don de pura gracia y bondad de Dios. No puede ser comprada ni hecha más segura por obras meritorias. Es otorgada gratuitamente a todos los que reciben fe para creer en la obra consumada de Jesucristo en el Calvario
(Jn. 1:1-3, 12, 14; 3:1-7; Hb. 10:4-14; 1 Jn. 2:2; Hc. 16:30-33; Rm. 10:9-10; Ef. 1:7; 2:8-9).
Respecto a la santificación:
Respecto a la santificación:
Creemos que el creyente, por haber sido traído por Dios al arrepentimiento y fe en la obra del Señor Jesucristo, es una nueva criatura y declarado legalmente justo. Creemos que todos somos llamados con un llamamiento santo a andar no conforme a la carne sino conforme al Espíritu y a vivir de tal manera en el poder del Espíritu que mora en nosotros, para que no satisfagamos la concupiscencia de la carne. Aunque todavía pecamos, con la ayuda del Espíritu Santo a través de la Palabra de Dios, vamos siendo transformados cada día para hacer su voluntad y crecer a la estatura de Cristo, varón perfecto. Dios nos va llevando más y más a parecernos a Jesucristo en pensamientos, acciones y sentimientos (Rm. 6:11-13; 8:2, 4, 12-13; Gál. 5:16-23; Ef. 4:22-24; Col. 2:1-10; 1 Pd. 1:14-16; 1 Jn. 1:4-7; 3:5-9).
Respecto a la Iglesia:
Respecto a la Iglesia:
La iglesia es una institución divina, creada, dirigida y sostenida por Dios. Hacen parte de ella los creyentes con sus hijos y es el cuerpo de Cristo. En ella se enseña la Palabra de Dios, se administran los sacramentos y los creyentes son instruidos y edificados en amor, compañerismo y unidad. La iglesia como reino de Dios, sirve al prójimo y la sociedad. Hasta el regreso de Cristo, el privilegio y deber del creyente es buscar el cumplimiento de la gran comisión de Cristo y ministrar en Su nombre a un mundo necesitado. Somos instrumentos de Jesucristo para la redención y reconciliación del pecador con Dios, mediante la expansión del evangelio (Mt. 25:31-46; 28:18-20).
Respecto a la vida cristiana:
Somos totalmente responsables delante de Dios de todo cuanto hacemos, decimos y pensamos. Por tanto, debemos vivir de acuerdo a los principios eternos y valores absolutos que Él ha establecido y que están claramente expresados en Su Palabra, para lo cual hemos sido capacitados por Dios. A través de los medios de gracia somos fortalecidos y animados a vivir para Él. Todo cristiano debe rendirse enteramente a hacer la voluntad de Dios y deleitarse en Él por siempre, porque no hay bien, felicidad o realización fuera de Dios.
Respecto a la vida cristiana:
Somos totalmente responsables delante de Dios de todo cuanto hacemos, decimos y pensamos. Por tanto, debemos vivir de acuerdo a los principios eternos y valores absolutos que Él ha establecido y que están claramente expresados en Su Palabra, para lo cual hemos sido capacitados por Dios. A través de los medios de gracia somos fortalecidos y animados a vivir para Él. Todo cristiano debe rendirse enteramente a hacer la voluntad de Dios y deleitarse en Él por siempre, porque no hay bien, felicidad o realización fuera de Dios.
El Credo apostólico es un excelente resumen de nuestra fe:
Creo en Dios Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra;
Y en Jesucristo, su único Hijo, Señor nuestro,
quien fue concebido del Espíritu Santo,
nació de la virgen María;
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado;
descendió al hades;
al tercer día resucitó de entre los muertos;
ascendió al cielo y está sentado
a la diestra de Dios Padre Todopoderoso,
de donde vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa iglesia universal,
la comunión de los santos,
el perdón de pecados, la resurrección del cuerpo,
y la vida perdurable.
Creador del cielo y de la tierra;
Y en Jesucristo, su único Hijo, Señor nuestro,
quien fue concebido del Espíritu Santo,
nació de la virgen María;
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado;
descendió al hades;
al tercer día resucitó de entre los muertos;
ascendió al cielo y está sentado
a la diestra de Dios Padre Todopoderoso,
de donde vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa iglesia universal,
la comunión de los santos,
el perdón de pecados, la resurrección del cuerpo,
y la vida perdurable.
Después de servir al Señor por varios años en varias iglesias en
diferentes regiones del país, tuve la convicción que debía ir a Bogotá para
comenzar una trabajo con miras al establecimiento de una iglesia con doctrina
bíblica y calvinista. Por esta razón emprendí mi viaje a la capital y el 1 de
abril del 2001, en horas de la tarde llegue para radicarme en un sector del
norte de la ciudad. Al día siguiente, el 2 de abril de 2001, se realizó la
primera reunión dominical en el apartamento que alquilamos al llegar de Neiva,
en la localidad de Usaquén en Bogotá, con miras a la conformación de la
iglesia. En la reunión inaugural asistieron 6 personas en total, de las cuales
solo cuatro están en la actualidad en la congregación. A partir de allí,
durante todos estos años, nos hemos reunido en el día del Señor para celebrar
la reunión dominical. Durante los primeros meses y años, no hubo frutos
visibles, por lo que debimos seguir orando, confiando y trabajando en la misión
que recibimos del Señor Jesús.
En el mes de abril de 2004 se realizaron los primeros bautismos de la
iglesia, en un lugar campestre en el municipio de Mesitas del Colegio. En esta
oportunidad recibieron el bautismo y fueron admitidos como miembros de nuestra
iglesia los hermanos: Nancy Dueñas, Raquel Dueñas y Juan José Dávila.
Comenzamos el trámite para ser reconocidos jurídicamente por el Ministerio del Interior
y en el año 2006, nuestra iglesia fue reconocida legalmente por el gobierno
Colombiano, con el nombre Iglesia Reformada Amor y Vida.
A partir de la llegada de nuestros hermanos Juan José Dávila y Felipe
Guataqui en el año 2004, fueron discipulados y llamados a una preparación con
miras a constituirse Ancianos de la Iglesia. Es así, como en el mes de octubre
del 2008, una vez ordenados, nuestra Iglesia fue organizada como iglesia
particular, perteneciente al Presbiterio Central de la Iglesia Reformada
Presbiteriana Colombiana.
A partir del año 2006, hemos realizado las escuelas bíblicas
vacacionales para niños y adolescentes de 3 a 15 años en el mes de julio. Nos
encontramos preparándonos para la realización de la octava Escuela Bíblica de
Vacaciones. Desde hace siete años, tenemos constituido el ministerio de parejas
que da acompañamiento mensual mediante talleres a las parejas de la iglesia.
También hemos seguido entrenando líderes para el ministerio. En el mes de
noviembre de 2011, nuestro hermano Juan José Dávila, fue enviado junto con su
familia para apoyar la iglesia Ebenezer, que estaba pasando por una coyuntura especial.
Nuestro hermano Juan José, siguió preparándose para el ministerio y el 28 de
octubre de 2012 fue ordenado al sagrado Ministerio por el Presbiterio central
de IREP. En el mes de diciembre de 2011, fueron ordenados los hermanos Sergio
Aldemar Dueñas y Hamilton Solano como diáconos de nuestra iglesia.
En el mes de diciembre de 2012, nuestra hermana Mónica, líder de la
iglesia, se caso con Lizandro Almeida y viajo al Brasil. Después de varios años
en el Presbiterio de IREP y ante varias situaciones complejas a nivel doctrinal
y metodológico, los Consistorios de las Iglesias Ebenezer y Amor y Vida, se
desvincularon del Presbiterio y comenzaron una relación fraterna con el
Presbiterio de Betania de la Reforma. Por esta razón a partir del mes de enero de
2013, nuestras iglesias hacen parte activa de la Iglesia Presbiteriana Betania
de la Reforma. Por consiguiente, este es el primer año que celebramos nuestro
aniversario número 12 con un nuevo nombre y unidos a un nuevo Presbiterio,
razones por las cuales agradecemos al Señor y a la Congregación por su
confianza, respaldo y animo en todos estos procesos de transición, para la
gloria del Señor.
En la actualidad nuestra iglesia esta totalmente reconocida por el
gobierno colombiano y cumple todas las exigencias del Ministerio del Interior
para su funcionamiento. A nivel ministerial, cumplimos con todos los requisitos
del Libro de Orden para su adecuado funcionamiento como iglesia particular.
Tenemos varios ministerios establecidos, Escuela Dominical organizada y cuatro obras
misioneras respaldadas, directamente por nuestra iglesia: Chía, Cajica,
Facatativa y Soacha, cada una con su respectivo misionero en proceso para el
ministerio pastoral. Además, tenemos un nuevo Anciano, Giovanni Gil, ordenado
el ministerio como Gobernante el día 28 de marzo de 2013.
En estos 12 años de historia agradecemos al Señor por la vida de mi
esposa, nuestros hijos, mis padres, los miembros de la congregación, los
miembros del presbiterio, los amigos de MINTS, los compañeros amigos del Consistorio
Felipe Guataqui y Giovanni Gil. A los candidatos al ministerio que me han
inspirado y a mi amigo, compañero y discípulo Juan José Dávila. Muchas gracias
por apoyar la obra del Señor y por caminar junto a este servidor. Tengo muy
gratos recuerdos de todos ustedes y oro a nuestro Dios que les bendiga y
sustente en todas las cosas.
Agradecemos al Señor Jesucristo por su infinita gracia para con
nosotros, al permitirnos servirle en su obra y desarrollar los dones que Él
mismo nos ha regalado. De igual forma, agradecemos a todos los hermanos y
hermanas que han apoyado fielmente la iglesia con su asistencia, finanzas,
dones y demás. Confiamos que el Señor Jesucristo nos permitirá seguir conociéndole,
sirviéndole y creciendo para su propia gloria y nuestro deleite espiritual.
Con amor en Cristo,
Ismael Quintero Rojas
Pastor Fundador
BIENVENIDOS
Con miras a cumplir la tarea misionera mediante acciones concretas de amor, servicio y misericordia, hemos creado la Fundación Caras Felices. Buscamos amar y servir a Dios y al prójimo con diversas actividades, donde nuestro objetivo principal es la presentación del evangelio.
QUIENES SOMOS
La Fundación se denomina Caras Felices; entidad sin ánimo de lucro cuya sigla es Fundacaras
Tiene como domicilio principal la ciudad de Bogotá D. C y su sede está en la Carrera 7F Nº 163A-48 y su ámbito de operación es la república de Colombia.
OBJETO SOCIAL
La Fundación tiene como Objeto Social promover la recuperación de los valores morales y espirituales existentes en la familia la cual no pertenece al sistema nacional de bienestar familiar, la comunidad y la sociedad Colombiana a través de talleres de convivencia y educación informal
Mediante talleres, foros, convivencias, brigadas, recreación y educación informal estamos logrando nuestro objetivo social.
Nuestro principal propósito es presentar el evangelio del Señor Jesucristo con acciones concretas de amor, servicio y esperanza.
Repartimos literatura, evangelios, Nuevos Testamentos y Biblias.
FINES ESPECÍFICOS
Promover valores éticos y espirituales a través de talleres con el fin de restaurar y fortalecer la unidad familiar.
Crear y desarrollar procesos de formación integral generando una cultura de convivencia y paz.
Prestar orientación y consejería en temas familiares y comunitarios a organizaciones sociales y personas naturales
Incentivar la organización comunitaria y familiar con el fin de mejorar la calidad de vida de los colombianos.
Gestionar y ejecutar recursos privados y públicos del orden local, nacional o internacional con el fin de cumplir con los objetivos sociales de la Fundación.
COMO VINCULARSE
Usted puede vincularse a esta causa social de las siguientes maneras:
1. Haciéndose socio de la Fundación
2. Donaciones en dinero para realizar proyectos
3. Apoyando la obra social mediante bonos
4. Ofreciendo sus servicios profesionales
5. Refiriendo campos de acción social
6. Regalando ropa, útiles, equipos, muebles…
7. Orando para que podamos seguir sirviendo
8. Aportando contactos para apoyar esta obra
Si está interesado en apoyar de alguna manera la Fundación, de ante mano le agradecemos y les invitamos a ponerse en contacto con nosotros o visitarnos en nuestra sede:
“17Así también la fe, si no tiene obras, está completamente muerta. 18Pero alguno dirá: Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras y yo te mostraré mi fe por mis obras” (Stgo. 2:17-18)
¡Es nuestro deseo contar con su apoyo y participación en la Fundación!
Visítenos o comuníquese con nosotros
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“17Así también la fe, si no tiene obras, está completamente muerta. 18Pero alguno dirá: Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras y yo te mostraré mi fe por mis obras” (Stgo. 2:17-18)
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Carrera. 7F No 163A – 48 - Tel.: 670 15 60 - Cel. 300 - 569 87 62
E-mail: fundacaras@hotmail.com